La ley dice: cortaste con tu ex nunca mas. Nada de reencuentros, nada de reproches, nada de intercambios, ni menos que menos, nada de tratar de entender por que, paso lo que paso. Muchas leyes, poco reales.
Todos necesitamos, ese reproche o ese intento de saber por que paso lo que paso. Triste, pero real. Sin discurso, no somos hombres, sin entendimientos, no podemos seguir. Asi es como, vos aunque fuiste la que cortaste, fuiste la que se la paso hablando mal de el, odiándolo, buscaste la excusa mas barata, para volver a contactarlo, luego de esos tan extensos cuatro meses.
Pasaron cuatro meses, la tristeza se fue, ya no te quedaron mas lagrimas por derrochar, y tampoco tenes esos recuerdos tristes tan presentes como antes. Lo llamaste…… con la excusa barata …. Te recibiste? Y es asi como todo gracias a una pregunta de solo dos benditas palabras, la charla se torma super extensa. El te te dice que te nota cambiada, pero mas tranquila. Que volvió a ver tu “vos” o super vos nuevamente. Hasta que en menos de un instante de los dos. Le decis.. queres venir a tomar una cerveza a casa. Birras quizá no tenes, pero no te interesa hacer que el chino de la vuelta de tu casa, se despierte de su siesta, con tal de tener esa cerveza con el.
Vos divina, poco make up, pero lo suficiente como para que se aprecie que te cuidas. Ropa ligera, mucha tela finita de verano, y ni hablar del largo del short.
Suena el timbre, temblas… Te saluda con un beso “ en el cachete”, que ya de entrada te parece extraño. Aunque sabes que es tu ex, te parte el alma, ese beso que parece una estalactita que te da la pauta que todo termino. Entra.
Es la peor cara que le viste en tu vida, vos esplendida llena de alegría riéndote sola, con tal de zafar la situación de mierda. Asi es como la charla empezó por el tema, laburo, tu perro que aprendió a buzear este verano, y mas bla bla que ambos saben que es cualquier fantochada.
Hasta que en un momento la cosa empieza, el reproche de:“No puedo entender como después de cinco años, no me diste otra oportunidad,para mi vos no estabas bien”, “vos nunca me hiciste darme cuenta de que estaba mal lo que hacia, por que no me dijiste”…
Y bueno innumerables preguntas por parte de el y tuyas que no conducen a nada, por que siempre son planteadas desde el enfoque del reproche.
En cambio una vez que el reproche, se transforma en pregunta, hace que todo, pero absolutamente todo, cambie su color.
Nadie dice que es fácil, pero si se deja el reproche, y se trata de entender que fue lo que paso por la cabeza del otro, es hasta posible que el señor encuentro, que siempre va corriendo, se detenga un momento.
Creo que hasta lo que uno jamás se hubiese imaginado es posible. Nunca se puede continuar, si no se evacúan todo tipo de dudas. Las dudas generan bronca, y nos pueden llevar a querer pegarle a nuestros, tan amados ex, hasta en nuestros sueños. Realmente horripilante. Creo que hasta me cuesta decirlo, pero “ yo entendí a mi ex”. Fue una de las mejores experiencias que tuve lejos, en mis 24 años de edad. Entender que paso por su cabeza, y que el entienda la mía. El encuentro, por mas raro y supernatural parezca, se dio. Por solo cinco días, de casi convivencia, volvi a ver a la persona que conocí. Fuimos solo el y yo. Nadie mas.
Hay mucha gente que dice, las reglas están para romperlas, y no se si será tan asi, pero en este caso, encontré la paz nuevamente. Lo mas desopilante del largo encuentro, no fue el sexo descomunal que no se tenía en casi los últimos tiempos, sino mas bien el aire nuevo de alivio, que me dejo. Suena un poco inentendible.. y si lo es. Pero a pesar de no saber, que me espera en el futuro, se que esa semana valio cada segundo junto a el, dándome pie a una nueva yo con posibilidades de un fin, o de un nuevo principio con un viejo amor.
Vos divina, poco make up, pero lo suficiente como para que se aprecie que te cuidas. Ropa ligera, mucha tela finita de verano, y ni hablar del largo del short.
Suena el timbre, temblas… Te saluda con un beso “ en el cachete”, que ya de entrada te parece extraño. Aunque sabes que es tu ex, te parte el alma, ese beso que parece una estalactita que te da la pauta que todo termino. Entra.
Es la peor cara que le viste en tu vida, vos esplendida llena de alegría riéndote sola, con tal de zafar la situación de mierda. Asi es como la charla empezó por el tema, laburo, tu perro que aprendió a buzear este verano, y mas bla bla que ambos saben que es cualquier fantochada.
Hasta que en un momento la cosa empieza, el reproche de:“No puedo entender como después de cinco años, no me diste otra oportunidad,para mi vos no estabas bien”, “vos nunca me hiciste darme cuenta de que estaba mal lo que hacia, por que no me dijiste”…
Y bueno innumerables preguntas por parte de el y tuyas que no conducen a nada, por que siempre son planteadas desde el enfoque del reproche.
En cambio una vez que el reproche, se transforma en pregunta, hace que todo, pero absolutamente todo, cambie su color.
Nadie dice que es fácil, pero si se deja el reproche, y se trata de entender que fue lo que paso por la cabeza del otro, es hasta posible que el señor encuentro, que siempre va corriendo, se detenga un momento.
Creo que hasta lo que uno jamás se hubiese imaginado es posible. Nunca se puede continuar, si no se evacúan todo tipo de dudas. Las dudas generan bronca, y nos pueden llevar a querer pegarle a nuestros, tan amados ex, hasta en nuestros sueños. Realmente horripilante. Creo que hasta me cuesta decirlo, pero “ yo entendí a mi ex”. Fue una de las mejores experiencias que tuve lejos, en mis 24 años de edad. Entender que paso por su cabeza, y que el entienda la mía. El encuentro, por mas raro y supernatural parezca, se dio. Por solo cinco días, de casi convivencia, volvi a ver a la persona que conocí. Fuimos solo el y yo. Nadie mas.
Hay mucha gente que dice, las reglas están para romperlas, y no se si será tan asi, pero en este caso, encontré la paz nuevamente. Lo mas desopilante del largo encuentro, no fue el sexo descomunal que no se tenía en casi los últimos tiempos, sino mas bien el aire nuevo de alivio, que me dejo. Suena un poco inentendible.. y si lo es. Pero a pesar de no saber, que me espera en el futuro, se que esa semana valio cada segundo junto a el, dándome pie a una nueva yo con posibilidades de un fin, o de un nuevo principio con un viejo amor.
dedicado a mi "big love". future is unwritten.
Entradas
